LA NOTICIA: S&P BAJÓ PERSPECTIVA DE LA CALIFICACIÓN CREDITICIA DE BRASIL
La calificadora internacional Standard & Poor’s Rating Services (S&P’s) revisó la perspectiva de la calificación crediticia en moneda extranjera de la República Federativa de Brasil, pasando de estable a negativo. Asimismo, confirmó la calificación de largo plazo en moneda extranjera en ‘BBB-’, en ‘BBB+’  en moneda local de largo plazo. La evaluación de transferencias y convertibilidad se mantuvo sin cambios en ‘BBB+’, al igual que la calificación a escala nacional (‘brAAA’ con perspectiva estable).

La institución argumentó que el cambio de perspectiva a negativa se deriva de un incremento en el balance de riesgos tanto en el panorama económico como en el político. Ello se debe a que consideran que las políticas propuestas hasta ahora, con el apoyo de la presidenta, cuentan con pocas probabilidades de ser ejecutadas por falta de respaldo por el congreso. Las continuas investigaciones de corrupción contra personas de alto perfil y compañías – tanto públicas como privadas – han llevado a una mayor incertidumbre política.

S&P’s revisó la perspectiva de la calificación en moneda extranjera (la más relevante a nivel internacional) derivado de que asigna una probabilidad de 1/3 de que la reducción en la incertidumbre política mejore la dinámica de flujos en los ingresos gubernamentales asociados a mayores acuerdos y a que el retorno a una tendencia de crecimiento tomará más tiempo del originalmente esperado.

IMPACTO: POSITIVO PARA MÉXICO
Impacto de corto plazo: La noticia de una menor perspectiva en la calificación crediticia de Brasil se suma los factores de mayor aversión al riesgo de la región. Ello a su vez agrega incertidumbre mundial, lo cual tendría un impacto negativo en el mercado de las divisas (especialmente en las economías emergentes), mismo que se verá reflejado en un probable aumento en la debilidad del peso (MXN/USD).

Impacto de mediano plazo: El cambio en la perspectiva de la calificación crediticia de Brasil, afecta negativamente al país debido a que se incrementa la probabilidad de una reducción en la calificación. Además, en la actualidad existen diversos fondos de inversión, tanto de bonos gubernamentales como en renta variable, cuyos prospectos no les permiten invertir en instrumentos con calificación crediticia por debajo de la calificación BBB- (la mínima requerida para grado de inversión). Dicha situación debería beneficiar a México, cuya calificación crediticia es de BBB+ (con grado de inversión), ya que forma parte de las economías emergentes con mejores fundamentales macroeconómicos, por lo que la redistribución de los activos de dichos fondos, en caso de que haya una reducción en la calificación de Brasil, ayudaría a un incremento en la inversión de portafolio hacia México.

En la gráfica siguiente se muestran los montos de inversión de portafolio en ambas economías para los últimos 5 años. Destaca que en los últimos cuatro años la inversión en México ha superado a la inversión en Brasil. Esta tendencia podría acentuarse dado el escenario descrito de una posibilidad de reducción en la calificación crediticia de Brasil por debajo del grado de inversión.

1 2