• Noticia: La cifra oportuna del PIB de México al 3T20 exhibió una contracción de 8.6% a/a, similar al -8.9% esperado por el consenso de analistas (GFB×+ -9.6%). Con cifras ajustadas por estacionalidad, la actividad creció 12.0% t/t. El dato final se conocerá el 26 de noviembre.
  • Relevante: El retiro parcial de restricciones a la producción en distintas industrias y a la movilidad social permitieron que la actividad rebotara en el 3T, tras caer a niveles de 2010 el trimestre previo. Gran parte de la recuperación provino del sector industrial, en especial de la manufactura y la edificación; los servicios mostraron un rezago a causa de la latencia de algunas medidas sanitarias, un regreso modesto en el consumo y un confinamiento parcial; el sector primario rebotó trimestre a trimestre y es el único con un crecimiento anual.
  • Implicación: La actividad seguirá mejorando, pero a menor ritmo y sujeto a la evolución de la pandemia. Con la falta de una política fiscal contracíclica, incertidumbre elevada y fragilidad en la demanda interna, la exportación seguirá siendo el mayor motor para la recuperación, pero se desaceleraría si no se renueva el apoyo fiscal en EE.UU. y ante el repunte mundial del coronavirus.

Rebote récord; sigue lejos de niveles pre-crisis

Tras regresar en el 2T a niveles de 2010, la actividad presentó su mayor variación trimestral registrada, asimilando el retiro parcial de algunas de las medidas sanitarias, impuestas para contener la propagación del virus, y la recuperación en la demanda agregada, en especial las exportaciones. Sin embargo, la economía todavía se encuentra lejos de los niveles de 2019.

  • Agropecuario (+7.6% a/a, +7.4% t/t). El confinamiento parcial pudo mantener sólido el consumo de alimentos en los hogares; la reapertura económica favoreció la demanda por parte de restaurantes y alivió disrupciones en la producción.
  • Industrial (-8.8% a/a,+22.0% t/t). El sector estuvo impulsado por el regreso en industrias detenidas durante gran parte del 2T, como la edificación y la manufactura; la segunda se vio favorecida, además, por un marcado regreso en la exportación. La minería presentó una ligera variación ante bajos niveles de extracción petrolera.
  • Servicios (-8.8% a/a, +8.6% t/t). El retiro de algunas restricciones sanitarias, un confinamiento menos estricto y el rebote moderado en el consumo favorecieron al comercio y servicios de transporte, recreación, hospedaje y prep. de alimentos y bebidas, de los más afectados en el 2T. Sin embargo, la latencia de límites a la movilidad social y a la oferta de algunas actividades explican el rezago en esta rama de la economía.

Recuperación modesta y atada al manejo de la pandemia

Estimamos una caída del PIB de 9.9% en 2020 y un rebote de 2.8% en 2021, ello sujeto a la evolución de la pandemia.

A menor ritmo, pero la actividad seguiría mejorando si se siguen levantando las restricciones en la oferta, más trabajadores regresan a sus puestos y se relaja el confinamiento. Sin embargo, la falta de una política fiscal contracíclica (e.g. expansión del gasto, estímulos) y la incertidumbre evitarán que algunos negocios reabran, lo que limitará a la inversión, el empleo y, en consecuencia, el consumo. Entonces, la exportación seguirá siendo el mayor motor para la recuperación, pero perdería vigor ante la incertidumbre política, menor apoyo fiscal y reposición de inventarios en EE.UU., y el rebrote del virus en el mundo.

El mayor riesgo es que la propagación del virus orille a que se recrudezca el distanciamiento social y la restricción en la producción, ocasionando un mayor daño permanente en la oferta y en la demanda, tanto local como global, a través de la pérdida definitiva de más negocios y empleos en el país, y un menor dinamismo en las ventas al exterior.