Retos: COViD-19 y guerra de precios del petróleo

Las medidas para contener la pandemia ocasionan paros en la actividad, siendo el sector servicios más vulnerable (aislamiento, cierre comercios, restricción viajes y eventos, etc.); la industria también es afectada por falta de insumos y baja demanda interna/ externa. Menor precio del crudo tiene un efecto neto negativo en finanzas públicas y Pemex (exportación de crudo, importación de refinados).

Reconoce retos en 2020; optimista sobre recuperación

El nuevo marco (Tabla 1) refleja los retos que enfrentará la las finanzas públicas: caída en la actividad por la pandemia y menores precios del crudo. Pese a ello, la estimación del PIB supera la nuestra (-4.2%), al igual que la producción de crudo (1,700 mbd). En el primer caso (PIB), reconocemos que la elevada incertidumbre dificulta su proyección, pero también que los riesgos para están sesgados a la baja. En el segundo, es posible un plan de E&P menos ambicioso, ante: baja rentabilidad de Pemex; condiciones financieras astringentes; menor margen del Gobierno Federal para dar apoyos a la paraestatal, aunque sí habrán.

En 2021, SHCP ve un rebote del PIB mucho mayor al nuestro (1.6%), y que la producción de crudo superará 2,000 mbd, lo cual podría ser relativamente optimista.

Relaja meta fiscal, pero apoyo fiscal será modesto

Las caídas en la actividad económica y el precio del crudo afectarían los ingresos en 2020, y la situación sanitaria presionaría el gasto (Tabla 2). Para enfrentar al desbalance, Hacienda recurrirá a las coberturas petroleras y al uso de 289.0 mmdp del fondo de estabilización (FEIP), pero ello será suficiente para alcanzar un superávit primario, por lo que ahora se prevé un déficit. Pese a recuperarse la recaudación tributaria y los ingresos petroleros, en 2021, el déficit primario sería mayor ante la diferencia ocasionada por el uso de fondos de estabilización en 2020 (289.0 mmdp)

Banco de México bajó la tasas de interés y liberó recursos para que la banca mantenga el crédito a la economía real. En el entorno actual, es deseable que la política fiscal también apoye a empresas y personas a sobrellevar la adversidad económica, lo que ayudaría a contener parte del choque y promover una rápida recuperación económica y en la recaudación. El documento describe algunas medidas*, y la intención de mantener programas y proyectos “prioritarios” y ayudas a Pemex. Es probable que sean insuficientes, por lo cual estimamos que la economía vislumbrará indicios de recuperación hasta finales del año.