Repunte en crédito empresarial – La cartera de crédito de la banca múltiple incrementó 10.6% a/a durante abril. El segmento que explica en mayor medida este aumento es crédito empresarial donde se han visto dos efectos: mayor disposición de líneas de crédito y el impacto del tipo de cambio en la cartera denominada en dólares. Esto último es relevante principalmente para créditos corporativos de bancos grandes.

Consumo, marcada desaceleración – El crédito a consumo registró un aumento de apenas 0.4% a/a, ante mayor cautela de los bancos en este segmento. Por su parte, hipotecario mantiene crecimientos cercanos a 10%.

Tendencia de alza en morosidad, aunque aún controlada – La morosidad a abril fue de 2.3% vs el 2.1% observado en abril del 2019. Por tipo de crédito la morosidad fue: Empresas 1.9%, Consumo 4.7% e Hipotecario 3.1%. Este último vio el mayor aumento (+50 pb a/a). Cabe recordar que en abril se empezó a reconocer el efecto del programa de diferimientos de pagos.

Menores tasas de interés – En el año los ingresos por intereses crecen a un ritmo de 4.5% mientras que los gastos disminuyeron 5.7%, con lo que el margen financiero registra un aumento de 12.0% a/a. Sin embargo, esto se ha visto contrarrestado por el alza de 58.7% a/a en la estimación preventiva por riesgos, con lo que el margen financiero ajustado registra una disminución de 3.9% a/a.

Presiones en utilidad – En el acumulado a abril la utilidad neta del sector ha disminuido 27.6% a/a mientras que en el mes de abril la reducción fue de 16.8% a/a. Con lo anterior se han observado disminuciones en rentabilidad. El ROA y ROE se ubicaron en 1.4% y 13.8% vs los niveles de 1.7% y 16.0% del mismo período del año previo.