• Noticia: El Inegi reveló hoy que el Indicador Global de la Actividad Económica para noviembre creció 1.7% a/a, por arriba del 1.0% esperado por el consenso; mes a mes y con cifras ajustadas, avanzó 0.3%.
  • Relevante: La actividad creció por primera vez en cuatro lecturas, gracias a la baja en contagios, y a la dilución de los cuellos de botella y de los efectos de los cambios en materia laboral. Pese al avance, la actividad se mantiene en niveles similares a los de 2016. La industria se debilitó en el margen, lo que fue compensado por avances en los servicios y el sector primario.
  • Implicación: Aunque prevemos que las cifras de diciembre podrán mostrar un avance adicional, este se vería interrumpido a inicios de 2022, por la aparición de Ómicron. Para todo 2022, proyectamos que el PIB crezca 2.6%.

Actividad da señales de vida al cierre de año

De acuerdo a las cifras ajustadas, la actividad rebotó a tasa mensual después de hilar tres meses en retroceso. Dicho regreso obedeció a la baja en contagios, menos cuellos de botella en la producción y la dilución de los efectos asociados a los cambios en materia de subempleo. Pese a la mejora, la actividad sigue en niveles similares a 2016. Abajo, el desglose por sectores:

  • Agropecuario (+6.9% a/a, +7.2% m/m*). Creció por primera vez desde julio y borró las caídas de los tres meses previos. Así, vuelve a ser la única rama de la actividad arriba de niveles pre-pandémicos.
  • Industria (+1.6% a/a, -0.1% m/m*). Gran parte del retroceso se explica por construcción (-0.6% m/m), reflejando bajos niveles de inversión, lo que eclipsó la aceleración en la minería y el avance marginal en la manufactura, donde industrias como eq. de transporte reflejaron menos obstáculos en la producción.
  • Servicios (+1.3% a/a, +0.5% m/m*). Primer avance en seis lecturas, gracias a la disipación de los efectos de los cambios en materia de subempleo (serv. profesionales y de apoyo a negocios +5.0% m/m), así como a los bajos niveles de contagios, que beneficiaron al comercio, esparcimiento, alojamiento y preparación de alimentos.

Repunte durará poco: Ómicron

Los bajos niveles de contagios y menores cuellos de botella en la producción nos llevan a estimar que las cifras para diciembre mostrarán un ligero avance. Por el contrario, prevemos que la actividad se debilite al inicio de 2022, pues la aparición de Ómicron induciría más obstrucciones en la producción, así como afectaciones en la movilidad y en la demanda por servicios.

Posteriormente, asumimos que, aunque estarán vigentes durante todo el año, las disrupciones en la actividad económica asociadas al virus se irán diluyendo, con más claridad a partir del 3T22.

Aunque la normalización económica permitirá más mejoras en el empleo y el consumo, estas serán limitadas por los bajos niveles de inversión, en un entorno de incertidumbre en sectores clave (e.g. energía) y mayores tasas de interés.

El motor externo dará soporte este año, ante la expectativa de que los EE.UU. crezcan más de 4% este año y su industria empiece a reflejar el plan de infraestructura.

Con todo lo anterior, proyectamos que el PIB se expanda 2.6% en todo 2022.