• Noticia: Hace unos minutos, la Reserva Federal publicó la minuta de la reunión del 14 al 15 de junio, cuando se decidió elevar la tasa de interés al rango de 1.50-1.75% (+75 pb.). El próximo anuncio tendrá lugar el 27 de julio.
  • Relevante: Participantes estiman que se requiere adoptar una postura restrictiva, dado el apretamiento del mercado laboral y las presiones inflacionarias. Reconocen que es posible que el crecimiento económico y el empleo se moderen en respuesta al apretamiento monetario.
  • Implicación: Anticipamos que la Reserva Federal y el Banxico ajusten de nueva cuenta en 75 pb. sus respectivas tasas de interés objetivo dentro de sus próximas reuniones, ante un panorama deteriorado para la inflación.
  • Mercados: El rendimiento del treasury a 10 años (2.91%, +10 pb.) se mantuvo al alza tras la publicación, lo cual fue replicado por el del bono mexicano con plazo similar. El USDMXN, se presionó momentáneamente, pasando de $20.69 a $20.72.

Menos crecimiento, más inflación

Los participantes explicaron que revisaron a la baja sus proyecciones del PIB, por obstrucciones en la producción y el apretamiento de las condiciones financieras. De nuevo, resaltaron que el mercado laboral muestra apretamiento y presiones salariales, pero estiman que se estabilice en un futuro, resultado del endurecimiento monetario.

Expresaron preocupación sobre la inflación de mayo, que confirmó que las presiones son persistentes. Ello, ante la “fuerte demanda” y obstrucciones en la oferta, junto con altos precios de materias primas (guerra Ucrania). En respuesta, los miembros elevaron sus previsiones para la inflación, aclarando que esperan que esta se modere, pues el apretamiento monetario ayudaría a corregir el desbalance oferta/demanda. La mayoría coincidió en que el balance de riesgos para la variable está inclinado al alza.

Controlar la inflación, cueste lo que cueste

Mercado laboral apretado, inflación lejos de la meta de 2% y con panorama deteriorado, justificaron el alza de 75 pb. en la tasa objetivo. E. George votó por subirla en 50 pb., al considerar que un ajuste mayor generaría incertidumbre, ya que al mismo tiempo se reduce la hoja de balance.

En adelante, los miembros coinciden en que las condiciones actuales requieren una postura monetaria restrictiva. Posteriormente, podrán evaluar el rumbo a seguir, sujeto a la situación económica. Para la reunión de julio, anticipan elevar la tasa objetivo entre 50 y 75 pb. Reconocen que la inflación tardará en volver a la meta; que existe el riesgo de que esta se vuelva más permanente, si se erosiona la credibilidad del público en la Fed; y, que el endurecimiento de la postura podría moderar el crecimiento económico “por un tiempo”, pero aclararon que la estabilidad en precios es necesaria para lograr el máximo empleo de forma sostenida, lo que implica que, en el corto plazo, predominará el cumplimiento del mandato de precios.

Ajustes en tasa objetivo similares para la próxima reunión

Si las próximas lecturas de inflación y de sus determinantes no dan señales de moderarse, incluso aunque la generación de empleos se desacelere, esperaríamos otra alza de 75 pb. en la tasa objetivo durante julio. Después, menores ajustes en la tasa objetivo tendrían lugar, sujeto a que la actividad y los precios se moderan con claridad.

En MX, el panorama para la inflación también se encuentra deteriorado. Con ello, y el agresivo endurecimiento monetario de la Fed, anticipamos que el Banxico eleve 75 pb. la tasa de referencia en agosto.