• Noticia: Esta mañana, el Inegi publicó el dato de las ventas minoristas para el mes de mayo, el cual creció 2.6% a/a con cifras originales, pero se contrajo 0.5% m/m con cifras ajustadas por efectos estacionales.
  • Relevante: Mensualmente, el indicador volvió a caer tras su rebote anterior, registrando así su segunda peor baja en lo que va del año. Pese a lo anterior, 16 de 23 componentes presentaron un desempeño positivo. A tasa anual con cifras originales se desaceleró desde el 3.8% anterior.
  • Implicación: En la segunda mitad del año, el consumo enfrentará un entorno aún menos favorable, debido a que, tanto la inflación como los costos financieros seguirán elevado, restringiendo el poder adquisitivo y el acceso al crédito, respectivamente. Además, la desaceleración económica generalizada interna y externa, afectará algunas variables relacionadas a la variable como el empleo, la confianza y la captación de as remesas.

Consumo discrecional exhibe más resiliencia

A tasa anual y con cifras originales, la variable se desaceleró de 3.8 a 2.6%, en parte, por un efecto calendario desfavorable (un domingo menos que en mayo 2022). En todo 2023, las ventas han crecido 4.6% en promedio.

En su comparación mensual y con cifras ajustadas, el comercio minorista se contrajo 0.5%, después de haber crecido 1.3% en abril. Este fue su tercer descenso en lo que va del año. La variable se colocó 12.7% arriba de niveles pre-pandemia, pero 0.5% debajo del cierre de 2022.

Al interior, 16 de 23 componentes crecieron mes a mes. Entre los que se debilitaron, destacaron algunos discrecionales (ropa, departamentales, en línea); autos avanzó, pero después de caer entre enero y abril.

Estos resultados se dan pese a que la tasa de desempleo se mantuvo baja (3.0%), la inflación se desaceleró (5.84% a/a), la confianza del consumidor subió (44.5 pts.) y la captación de remesas se aceleró (+10.7% a/a). No obstante, estos podrían estar reflejando una mayor preferencia por el gasto en servicios.

Condiciones para consumo serán menos favorables en 2S

Estimamos que el consumo privado enfrente un entorno menos favorable en el segundo semestre, especialmente en aquel más discrecional. Si bien la inflación seguirá cediendo, se mantendrá algo elevada, erosionando el poder de compra de las familias. Por su parte, un entorno de altas tasas de interés puede comenzar a restringir el acceso al financiamiento. La expectativa de un menor crecimiento económico en los próximos trimestres, en México y en los EE. UU., impactarán al dinamismo en el mercado laboral y la confianza, y al crecimiento en las remesas, respectivamente.