- Noticia: Hace unos minutos, Banxico recortó el objetivo de la tasa de interés a 8.59% (-50 pb.), en línea con nuestra expectativa y la del consenso.
- Relevante: La decisión de recortar la tasa objetivo en 50 pb. volvió a ser unánime, y se dio pese a que el Instituto elevó su pronóstico de inflación general y subyacente para el corto plazo. Reiteró su guía prospectiva sin cambios.
- Implicación: La guía volvió a dejar abierta la posibilidad de otro ajuste de 50 pb. en junio, pero el comportamiento reciente de la inflación y los retos sobre su panorama, y la disminución acumulada en la tasa real ex ante, sugieren mayor cautela.
- Mercados: La decisión estaba ampliamente descontada. El USDMXN mantuvo su tendencia alcista. El rendimiento del bono a 10 años bajó un poco más después del anuncio.
Revisó pronósticos de inflación en el corto plazo
Aunque el PIB rebotó algo, el comunicado afirmó que la actividad económica mantuvo debilidad en el 1T. Resaltó como riesgos a la baja a la incertidumbre y las tensiones comerciales.
La descripción del entorno inflacionario fue menos favorable. La inflación general sumó en abril tres meses al alza. Así, se retiró del documento la frase que especificaba que esta se encontraba en mínimos desde 2001. El subyacente tocó máximo de ocho meses, pero la Junta de Gobierno se limitó a decir que este subió “en el margen”, y ya no mencionó que esta se ubicó “ligeramente debajo” del promedio 2003-19. El documento también rescató que aumentaron las expectativas de precios del sector privado.
La Junta revisó su previsión de inflación del 2T25 al 3T25 ante mayor presión en mercancías, mas sigue estimando que converja en la meta de 3% en el 3T26. Como en marzo, afirmó que su balance de riesgos está inclinado al alza, pero mejoró ante la dilución de los choques globales de otros años. La Junta sigue pensando que las disputas comerciales añaden incertidumbre y representa riesgos en ambos lados del balance.
Guía mantiene laxitud
Aunque ya no afirmó que avanzó el combate a la inflación, sigue hablando de una “nueva fase” que requiere tasas de interés menores que cuando se trataron de mitigar los choques globales de años pasados. Ello considerando la depreciación cambiaria, la debilidad en la actividad y posibles impactos del tema comercial. Así, dado el panorama inflacionario y la magnitud de la restricción monetaria, la Junta decidió de nuevo por unanimidad volver a recortar la tasa objetivo en 50 pb.
Pese al repunte en la inflación y al ajuste en pronósticos, la Junta refrendó su guía futura. Reiteró que “en adelante podría continuar con la calibración de la postura (…) y considerar ajustarla en una magnitud similar”, pero manteniéndose restrictiva en el horizonte.
Sin mejora en panorama, difícil justificar otro ajuste de 50 pb.
Aunque permanece en terreno restrictivo, la tasa de interés real ex ante ha disminuido significativamente en el año. Por su parte, la inflación general y subyacente se han acelerado, y su panorama es retador, a pesar de la desaceleración económica, como así lo ilustra el ajuste en los pronósticos del banco central. Todo lo anterior nos lleva a estimar un ajuste más moderado en las tasas de interés en adelante, a pesar de que la guía prospectiva sugiere lo contrario.