Noticia: La inflación de México correspondiente a la 1QJunio creció 4.00% a tasa anual, por debajo del 4.03% estimado del consenso de analistas (GFB×+: 3.99%). Por otro lado, el índice subyacente* ascendió a 3.87%% a/a (3.81% esperado por GFB×+).

  • Relevante: La caída en la tasa anual del índice general se explica por el subíndice no subyacente, el cual reflejó el menor dinamismo en productos energéticos ante la caída en precios internacionales del petróleo. Sin embargo, el subíndice subyacente se aceleró, destacando que sus dos componentes se presionaron: mercancías y servicios.
  • Implicación: Pese al relajamiento de la postura de otros bancos centrales (Fed, BCE), consideramos que la persistencia de niveles elevados de inflación y el reciente desempeño del índice subyacente, aunado a un balance de riesgos desfavorable para los precios, requerirán que Banxico mantenga la tasa de interés objetivo en su nivel actual.
Baja Explicada por Energéticos

Después de cinco quincenas por encima, el índice general regresó a niveles de 4.00% a/a, al registrar su tercera moderación en la tasa interanual al hilo. Lo anterior se explica al interior del índice no subyacente, particularmente por el rubro de energía.

El componente de energéticos presentó una caída quincenal de 0.76%, siguiendo el desempeño del gas LP y las gasolinas (ver figura 1), que se vieron incididas por la contracción de 15.3% en los precios internacionales del petróleo entre la 2Qmayo y la 1Q de junio. Un año antes, el rubro de energía se expandió 1.32% q/q, lo que explicó la caída en la tasa interanual (ver tabla 1). Lo anterior más que compensó el avance año-sobre-año en los precios de productos agropecuarios, en especial en el rubro de pecuarios.

Presión Generalizada en Subyacente

El índice de precios subyacente se aceleró y se mantiene por encima del 3.50% desde 2017. Al interior, sus dos subíndices se presionaron al alza, tanto mercancías como servicios. En el caso de las primeras, las alimenticias se aceleraron por novena quincena consecutiva, siguiendo los precios de productos agropecuarios (insumos); las no alimenticias también experimentaron un mayor dinamismo.

En el caso de los servicios, destacó una mayor variación interanual en los rubros de vivienda y otros servicios, no obstante un menor crecimiento de la economía.