• Noticia: Esta mañana, el INEGI dio a conocer el dato del Indicador del Consumo Privado en el Mercado Interno correspondiente a febrero de 2020, el cual creció 0.5% a tasa anual, con cifras originales, pero se contrajo 0.5% mensualmente, con datos desestacionalizados.
  • Relevante: La aceleración anual se debió a un efecto calendario positivo (año bisiesto); con cifras corregidas, la variable extiende su tendencia negativa. En febrero, destaca la debilidad en consumo de bienes importados y la resistencia en servicios. Pudo contribuir la moderación en la confianza del consumidor y el repunte en la inflación.
  • Implicación: Durante la pandemia, el consumo de servicios será de los más afectados; posteriormente, la frágil recuperación de empleos, alta incertidumbre, menor captación de remesas, entre otros, ocasionarán un comportamiento defensivo de los hogares, que pesará sobre el consumo discrecional (bienes durables, servicios recreativos).

Día extra favorece al indicador

El crecimiento a tasa anual con cifras originales se explica en gran medida por el día adicional que hubo en febrero por ser año bisiesto. Descontando lo anterior, el indicador registró una caída de 0.6%, la primera en 11 lecturas. La variación mensual con cifras desestacionalizadas confirma la debilidad en el índice, que sumó su tercera caída consecutiva. La inflación se aceleró ligeramente, afectando el poder adquisitivo, y se moderaron los niveles de confianza y la expansión del crédito al consumo, todo ello induciendo condiciones menos favorable para el consumo.

Resistencia en servicios

Al interior del indicador, el único rubro que presentó un avance mensual, fue el de consumo de servicios de origen nacional (+0.3%), que rebotó luego de dos lecturas consecutivas en contracción. Lo anterior fue opacado por una caída en el consumo de bienes tanto de origen nacional (-0.5%), como en los importados (-4.5%, peor desde marzo de 2019. En el caso de los últimos, es posible que el cierre económico en China tuviera alguna incidencia.

Consumo empeorará por pandemia

El consumo de servicios es de los más vulnerables durante la pandemia, además de que posiblemente serán los últimos en poder reactivar su oferta. Posteriormente, bajo la expectativa de una pobre recuperación en el empleo, elevada incertidumbre, desaceleración en la expansión del crédito al consumo y menores ingresos por remesas (detrimento mercado laboral EEUU), anticipamos un comportamiento defensivo por parte de los hogares, que afectará, en mayor medida, la demanda por bienes durables y servicios recreativos, al ser más discrecionales.