• Noticia: Hace unos momentos, el INEGI publicó el dato del Indicador de Consumo Privado en el Mercado Interno de noviembre, la cual se contrajo 7.1% a/a, con cifras originales; y, con cifras ajustadas, avanzó 3.0% m/m.
  • Relevante: El consumo privado presentó su sexto avance mensual, incluso se aceleró frente al dato previo. Favoreció la evolución en la inflación y las remesas, el continuo relajamiento del confinamiento y medidas sanitarias, y, en especial, el alargamiento de las campañas promocionales de fin de año. Todos sus componentes crecieron contra octubre, en especial los bienes importados.
  • Implicación: La evolución del consumo privado se vería comprometida a inicios de 2021, ante la fuerte propagación del virus, que ocasiona un endurecimiento de las medidas sanitarias, y el deterioro en el empleo y la confianza. Prevemos que se recupere en el 2S21, a medida que el control de la pandemia (vacunación) permita una más clara y segura reapertura económica.

Buen Fin le da aire al consumo previo a nuevos choques

Crece mes a mes por sexta lectura, incluso acelerándose. A ello, contribuyó los efectos de la extensión de la campaña de “El Buen Fin”, que pudo incitar un mayor a lo usual traslado del gasto de los hogares, de octubre a noviembre, para aprovechar la temporada de descuentos; por otro lado, las medidas sanitarias y el confinamiento se siguieron relajando durante noviembre; finalmente, la inflación se desaceleró, favoreciendo al poder adquisitivo, y las remesas continuaron creciendo. Todo lo anterior eclipsó los tropiezos marginales vistos en el empleo y la confianza del consumidor. Aunque ha mejorado desde el colapso de la primavera, el indicador sigue lejos de los niveles de 2019.

Mejora robusta, más marcada en bienes importados

La demanda por bienes volvió a expandirse, ante el efecto de las campañas promocionales; destacó el componente de bienes importados, al subir 20.4% m/m, mientras que los de origen nacional crecieron 0.8%. El rubro de servicios rebotó 1.0% (-0.5% en octubre), gracias a menores confinamientos y restricciones comerciales, aunque todavía muestran un rezago en relación al resto.

Recuperación frágil, con mayor claridad en 2S21

Es posible que el consumo se haya deteriorado en diciembre y enero, con el recrudecimiento de la pandemia y la reactivación de las medidas sanitarias. Conforme el control de la pandemia (despliegue vacunas) permita que la actividad se normalice con mayor claridad, hacia el 2S21, el consumo podrá recuperarse, en especial los servicios, aunque de forma parcial, pues los últimos confinamientos y cierres de comercios implican la pérdida permanente de más puestos de trabajo, dada la falta de apoyo fiscal.