• Noticia: Esta mañana el INEGI dio a conocer la cifra del Indicador de Consumo Privado en el Mercado Interno de octubre, el cual creció 5.7% a/a con cifras originales, y 0.2% m/m con cifras ajustadas por estacionalidad.
  • Relevante: A tasa anual, el indicador continuó desacelerándose por una menor comparación, mientras que, mensualmente, creció por cuarta lectura consecutiva. El repunte del consumo de bienes importados compensó la moderación en el de bienes nacionales y el estancamiento del de servicios. Aún se ubica debajo de sus niveles de precrisis.
  • Implicación: La variable podría ver cierta mejora a finales de año gracias a la moderación en los contagios en la última parte del año, y por un menor desempleo, aunque a principios de 2022 el consumo seguirá limitado por la nueva ola de contagios (Ómicron) y por la elevada inflación.

Consumo avanza por cuarta lectura

El indicador volvió a moderarse en su comparativa interanual, con cifras originales, debido a una base comparativa menos débil.

Con cifras desestacionalizadas, hiló cuatro lecturas con variaciones mensuales positivas, pero se moderó respecto a septiembre (+0.8%). Pese al avance mensual, el indicador aún se encuentra 3.1% debajo de sus niveles registrados en enero de 2020.

Al interior, repuntó el consumo de bienes importados, en cierta medida por el desahogo parcial en los cuellos de botella en el comercio global, que provocó la variante Delta; los servicios se estancaron, posiblemente debido a que, si bien ya venía presentando una tendencia a la baja, el contagio era relativamente elevado a inicios del mes.

Entre los factores que pudieron respaldar a la variable, encontramos que las remesas se aceleraron a 33.8% a/a, mientras que la confianza del consumidor subió hasta 43.7 pts. Por otro lado, un factor que pudo limitar al consumo, fue el deterioro en el poder adquisitivo de los hogares, pues la inflación creció 6.24% a/a.

Cierta mejoría al cierre de 2021; peligro al inicio de 2022

Los contagios bajaron durante buena parte del 4T21, mientras que el empleo vio mejoras adicionales, lo que daría soporte a la variable para las lecturas de noviembre y diciembre. Para inicios de 2022, el incremento en los contagios podría debilitar al consumo, especialmente en servicios.  Por otro lado, aunque se moderará en la segunda mitad del año, prevemos que la inflación siga relativamente elevada, erosionando la capacidad de gasto de los hogares.