• Noticia: La inflación de México correspondiente a junio creció 4.65%, su mayor nivel en 2018 y por encima de las expectativas del consenso de analistas y de GFBX+ (4.59%). La inflación subyacente creció 3.62% a tasa anual.
  • Relevante: Consideramos que el avance en el precio de los energéticos ha presionado al índice de precios al consumidor y al productor. Además, hemos detectado en el primer caso que la inflación subyacente mantiene tendencia a la baja gracias a menor presión en mercancías ya que los servicios se han acelerado en el año; mientras que para el segundo caso, encontramos además presión en industrias como construcción, metálica y equipo de transporte.
  • Implicación: En relación a que el panorama para la inflación todavía presenta riesgos de un detrimento (volatilidad cambiaria, precios internacionales de energía, guerra comercial, etc.), no descartamos la posibilidad de un ajuste adicional en la tasa de 25 pbs. por parte de Banxico.
Productor: Desfavorable Entorno Externo

También se publicó el Índice Nacional de Precios al Productor (INPP). La lectura de junio confirma una tendencia al alza: pasó de 5.41% a 6.95%, niveles no vistos en 12 meses. Presiones significativas provienen de sectores como minería (no petrolera), construcción y manufactura de derivados del petróleo, productos metálicos y equipo de transporte. Los últimos podrían ser señal del alza internacional en el precio del crudo y metales, adicional a un posible efecto de los aranceles al acero y aluminio que entraron en vigor en junio.

En cuanto a las mercancías y servicios finales destinados al consumo interno (que tienden a incidir en la inflación al consumidor), éstos se aceleraron por segundo mes al pasar de 4.12% a 4.30%.