• Noticia: La inflación al consumidor durante junio de 2024 creció 4.98% a tasa anual, por arriba de nuestro pronóstico de 4.83% y el 4.87% del consenso. El índice subyacente* se expandió 4.13%, en línea con el 4.13% previsto por Análisis B×+ (consenso: 4.14%).
  • Relevante: La inflación interanual se aceleró por cuarto mes ante presiones en el índice no subyacente, especialmente alimentos frescos. El subyacente creció a su menor ritmo desde 2021: la variación de las mercancías continuó cediendo; la de los servicios se ajustó ligeramente a la baja, en particular los distintos a educación y vivienda.
  • Implicación: Aunque estimamos que la inflación puede moderarse en el 2S, recientemente se acentuaron algunos riesgos al alza y su panorama parece más incierto. Por lo tanto, prevemos que Banxico mantenga la tasa de referencia en 11.00% el mes próximo.

Come frutas y verduras… si puedes

La variación mensual del índice general fue mayor a la del mismo periodo del año pasado, y menor a la observada en 2020-2022. Destacó la presión en productos agropecuarios, especialmente frutas y verduras. También algunos energéticos (gasolinas) incidieron al alza.

El crecimiento mensual del subyacente fue el menor para un mismo periodo desde 2015, particularmente por mercancías.

Inflación anual, la mayor en 12 meses

La variación interanual se aceleró por cuarto mes consecutivo y fue la mayor en un año. Ello, al tiempo que el índice no subyacente continuó subiendo, tanto productos agropecuarios como energéticos, resaltando la fuerza en el caso de los primeros.

El índice subyacente se desaceleró por 17ª lectura al hilo y apuntó su menor variación desde marzo de 2021. El componente de mercancías continuó explicando gran parte de la moderación, ante la dilución de los choques de años pasados (pandemia, guerra Ucrania) y la apreciación cambiaria de meses previos, aunque el rubro de mercancías no alimenticias tuvo un modesto rebote. El traspaso más gradual de los choques de años pasados y su mayor sensibilidad a las presiones salariales han provocado que los servicios se resistan más a bajar. No obstante, en las más recientes lecturas se observó cierta moderación en aquellos distintos a educación y vivienda, lo que podría ser consistente con la desaceleración en la actividad económica observada en el año.

Costos de producción tampoco dieron tregua

Exhibieron su mayor crecimiento en 19 lecturas, al pasar de 3.33 a 5.07% a/a. Ello, en línea con los altos precios que el petróleo presentó recientemente, el repunte en el costo de fletes marítimos y la depreciación del MXN. El costo de bienes y servicios destinados al consumo final interno se aceleró de 4.84 a 5.21%.

Panorama no permitirá “discutir ajustes en tasa”

Estimamos que la inflación interanual exhiba cierta desaceleración en la segunda parte del presente año. Sin embargo, reconocemos que el panorama todavía es incierto y recientemente se han agudizado algunos riesgos al alza.

Continuamos previendo que un menor crecimiento económico en el 2S24 contribuya a que se moderen algo más los precios. No obstante, advertimos que el proceso no será lineal y estimamos que la inflación baje del 4% (límite superior del rango de tolerancia de Banxico) hasta 2025. Primero, es posible que la dilución de los choques de años pasados ya no contribuya al proceso de desinflación en mercancías. Segundo, la depreciación cambiaria observada en junio, de extenderse, ejercería algo de presión al alza en bienes importados. Tercero, si bien prevemos que cedan algo, los servicios mantendrán cierta renuencia a bajar, principalmente por el traspaso de las presiones salariales acumuladas, además de que algunos genéricos tienden a ajustarse con un mayor rezago (e. g. vivienda). Dicha renuencia se agravaría en caso de que en los próximos años se mantenga una agresiva política de salario mínimo, y, además, las expectativas de precios se anclen en niveles superiores a la meta del 3%. Cuarto, la latencia de tensiones geopolíticas y eventos climáticos adversos pueden mantener elevados los precios de productos energéticos y alimentarios.

En la última reunión, la Junta de Gobierno de Banxico adelantó que “prevé que el entorno inflacionario permita discutir ajustes en la tasa de referencia”. Sin embargo, las cifras conocidas hoy superaron las expectativas de nosotros, el consenso y Banxico, y nos confirman que el panorama inflacionario sigue siendo difícil. Además, los miembros del Fed recientemente estimaron menos reducciones en el objetivo de los fondos federales para este año. Por lo anterior, en ausencia de sorpresas positivas en las próximas lecturas de inflación, prevemos que Banxico no ajuste la tasa objetivo en agosto.