• Noticia: El INEGI publicó ayer el Índice de Actividad Industrial para diciembre, el cual creció 0.02% a/a, por debajo del 2.0% previsto por GFB×+ (consenso: 1.2%). A tasa mensual y con cifras ajustadas, se contrajo 0.7%.
  • Relevante: La actividad industrial se enfrió al cierre del año pasado. En todo 2023, registró un crecimiento de 3.5%, impulsado principalmente por el segmento de la construcción; la manufactura vio un limitado avance ante la desaceleración en la actividad industrial en los EE. UU.
  • Implicación: En la primera parte de 2024, estimamos que la producción industrial mantenga un dinamismo limitado. Ello, al tiempo que la inversión y el consumo crezcan a menor ritmo, y las exportaciones sigan mostrando cierta atonía, en un entorno de condiciones financieras astringentes y de menor crecimiento económico externo.

Un cierre de año algo Grinch

Con cifras originales y a tasa anual, la actividad prácticamente se estancó en diciembre y vio su menor variación desde octubre 2021, tras subir 2.9% en noviembre. Con cifras ajustadas, pasó de 3.0 a 1.2% a tasa anual; y, mes a mes, se contrajo por primera por segunda ocasión al hilo, aunque menos que en noviembre (-1.0%). En todo 2023, la actividad industrial se expandió 3.5%.

  • Minería (-1.5% a/a, 1.4% m/m)*. Se recuperó del descenso de noviembre. Se expandió 1.5% en todo 2023, impulsada por la extracción de petróleo y gas, y los servicios relacionados.
  • Gen., transmisión EAyG (2.1% a/a, -1.3% m/m)*. Descendió a tasa mensual por cuarta lectura al hilo. Pese a ello, alcanzó a acumular un avance de 3.6% el año pasado.
  • Construcción (15.5% a/a, -0.6% m/m)*. Presentó su segunda baja mensual al hilo, al tiempo que la edificación devolvió parte de los sólidos avances previos. La construcción fue la rama con mayor crecimiento en 2023 (15.7%), destacando el caso de la obra civil (80.0%).
  • Manufactura (-2.3% a/a, -1.2% m/m)*. Tercera contracción mensual consecutiva y la mayor desde septiembre 2021, resaltando la fragilidad en el segmento de equipo de transporte. Creció 1.0% en todo 2023, en línea con la desaceleración en las exportaciones y en la actividad industrial en los EE. UU.

Mantendrá ritmo semi lento en el corto plazo

En la primera parte de 2024, estimamos que la inversión fija bruta y el consumo crezcan a un menor ritmo, y que las exportaciones sigan mostrando cierta atonía, lo que supondría una desaceleración en la producción industrial en México.

En el corto plazo, los bajos niveles de desempleo, y la intención del Gobierno Federal de concluir las obras insignia antes del cambio de administración, darán todavía soporte al consumo privado y la inversión, respectivamente, beneficiando a la actividad industrial.

No obstante, prevemos que, en un entorno de tasas de interés reales elevadas y desaceleración económica en el ámbito local y mundial, se vayan erosionando parcialmente la confianza, la inversión y el consumo. Además, indicadores oportunos del sector manufacturero en los EE. UU. siguen apuntando a un lento dinamismo en los próximos meses, lo que supondría que se extienda la atonía en las exportaciones mexicanas.

En un horizonte mayor, asumimos que el proceso de relocalización de las cadenas de suministro producirá una mayor participación de México en el mercado estadounidense, dando soporte para la inversión, las exportaciones y el crecimiento industrial en el país.