Indicador alternativo de inflación 

El indicador de Inflación CDMX B×+ calcula las variaciones mensuales de precios de una canasta de bienes y servicios para la clase media de la CDMX ($50 mil promedio al mes por hogar). Se trata de un indicador alternativo al publicado por el INEGI ya que atiende a un segmento en particular de la población. El objetivo de la nota es ayudar a la toma de decisiones de inversión mediante el conocimiento de los rendimientos reales (descontando inflación) en la creación de patrimonio.

‘Buen Fin’ desinfla precios

En noviembre, siete de los 13 subíndices que conforman nuestro indicador (que en conjunto pesan casi un 60% del índice general), exhibieron una variación mensual negativa. El descenso en la mayoría puede explicarse por los efectos de las campañas promocionales típicas de noviembre (e. g. ‘Buen Fin’, ‘Black Friday’. ‘Cyber Monday’). La mayor disminución se observó en Telefonía, específicamente equipos celulares. Le siguió Esparcimiento, pues las campañas promocionales también abarcaron ciertos servicios recreativos (e.g. paquetes turísticos). También se observaron menores precios en Ropa y accesorios.

Por su parte, el rubro de Supermercado también disminuyó en el mes. Los genéricos con mayores caídas fueron: plátano macho, aguacate Hass, limón, plátano Chiapas, y manzana Gala.

Todo lo anterior compensó la presión que se observó en la categorías como Vivienda (rentas), de Salud, y de Alimentos fuera del hogar. En este último, a veces tienen lugar ajustes por el inicio de la temporada de alta demanda, pero también puede reflejar los incrementos en costos (salarios, alimentos).

Entorno económico induciría alivio en precios, en principio

La dinámica inflacionaria se moderaría gracias a la desaceleración económica. No obstante, persisten elementos que pudieran obstaculizar su desaceleración, como: i) la depreciación cambiaria, al encarecer los precios de mercancías importadas; ii) que los conflictos geopolíticos y las condiciones climáticas afecten a los precios de productos energéticos y agropecuarios; iii) el aumento acumulado en salarios (el gobierno anunció un ajuste del 12% al salario mínimo para 2025), presionando a diversos servicios intensivos en mano de obra, un riesgo especialmente elevado para la CDMX.