• Noticia: La inflación al consumidor durante febrero de 2024 creció 3.77% a tasa anual, prácticamente en línea con nuestra previsión de 3.78% y apenas arriba del 3.75% del consenso. El índice subyacente* se expandió 3.65%, ligeramente arriba de nuestro pronóstico (3.63%).
  • Relevante: La inflación interanual creció por segundo mes por debajo del 4% pese al repunte ocasionado por productos agropecuarios. El índice subyacente no vio mayor cambio contra la lectura previa. Al interior de este, el alza en mercancías se compensó por la menor fuerza en servicios.
  • Implicación: Considerando los riesgos al alza sobre el panorama inflacionario y la volatilidad financiera, por un lado, y, por el otro, el nivel de la tasa real ex ante, juzgamos que Banxico cuenta con espacio para ir recalibrando con cautela su postura monetaria. No obstante, la mayoría de la Junta de Gobierno parece inclinarse a repetir en marzo un “súper recorte” en las tasas como el de febrero.

Variación mensual: Bajaron frutas y verduras de nuevo

El crecimiento mensual fue superior a lo visto en el mismo periodo de 2024 en función de una menor contracción en el índice no subyacente, particularmente en frutas y verduras, así como ante el aumento en pecuarios (huevo, carne de res y cerdo). La variación del subyacente fue inferior a la de febrero de los tres años previos gracias a una menor fuerza en servicios, mientras que las mercancías comienzan a exhibir un mayor dinamismo.

Variación interanual logró quedarse debajo del 4%

Pese a rebotar, la variación interanual del índice general hiló dos lecturas debajo del 4%. Dicho repunte se originó en el índice no subyacente, donde la menor debilidad en frutas y verduras y el aumento en pecuarios eclipsaron el desaceleración en energía.

El subyacente no ha mostrado mayor cambio en las últimas dos lecturas. Después de exhibir variaciones atípicamente bajas el año pasado, el rubro de mercancías repuntó en las últimas tres observaciones. Esto ha sido más evidente en el apartado de mercancías no alimenticias, típicamente más sensible al efecto traspaso del tipo de cambio. Por su parte, en un contexto de bajo crecimiento económico, los servicios se moderaron un poco más en febrero, presentando un crecimiento inferior al 6% desde octubre. No obstante, todavía presentan un dinamismo muy superior a su promedio histórico, posiblemente reflejando su mayor sensibilidad al incremento en los costos laborales.

Inflación al productor en su mayor nivel desde 2022

Pasó de 7.76 a 7.97% a/a, máximo desde septiembre de 2022. Ello en parte obedece a mayores precios de fertilizantes y de algunas materias primas (acero, aluminio), y a un tipo de cambio depreciado. El costo de bienes y servicios destinados al consumo final interno pasó de 5.46 a 5.79%, máximo desde mayo 2023.

Guía laxa de Banxico para reunión de marzo

Prevemos que este año el crecimiento interanual en el índice nacional de precios al consumidor (INPC) al cierre del año se mantenga alrededor de los niveles actuales, apenas debajo del límite superior del rango de tolerancia de Banco de México (3% +/- 1%). Dicho lo anterior, reconocemos que prevalecen riesgos al alza y ha aumentado la incertidumbre sobre el panorama.

Prevemos que el bajo crecimiento económico contribuya a que el crecimiento interanual del INPC se mantenga debajo del 4% en 2025. Esto sería más evidente en el rubro de los servicios, aunque su desaceleración puede ser acotada por las presiones salariales acumuladas de los últimos años, las cuales no han sido acompañadas por un aumento proporcional en la productividad laboral. Por su parte, el rubro de las mercancías podría extender su reciente repunte, por una baja base comparativa y ante la depreciación cambiaria. Asimismo, no pueden descartarse nuevos choques en el índice no subyacente a raíz de las tensiones geopolíticas y condiciones climáticas adversas. Finalmente, las políticas comerciales proteccionistas en los EE. UU. representan – en el menor caso – un foco adicional de incertidumbre.

Aunque la inflación hiló dos lecturas debajo del 4%, el subyacente superó nuestras expectativas. Además, el panorama es retador e incierto. Considerando dicho panorama y la volatilidad financiera, por un lado, y el nivel de la tasa real ex ante, por el otro, consideramos que Banco de México cuenta con espacio para reducir con cautela la magnitud de la restricción monetaria. No obstante, en la minuta de la reunión del 5 de febrero, donde se votó 4-1 a favor de recortar en 50 pb. la tasa objetivo, la mayoría de la Junta de Gobierno del Banco central expresó que en próximas ocasiones volvería a considerar ajustes similares en las tasas. Así, no podemos descartar la posibilidad que el 27 de marzo se anuncie otro ajuste de 50 pb. en el referencial, si bien, en principio, ese no sería nuestro escenario central.