• Noticia: La inflación al consumidor durante abril 2022 creció 7.68% a tasa anual, por debajo de lo esperado por GFB×+ (7.72%) y el consenso (7.73%). El índice subyacente* se ubicó en 7.22%, superando nuestra proyección (7.16%).
  • Relevante: La variación anual del índice de precios al consumidor fue la mayor desde 2001, tanto para el índice general como para el subyacente. La variable sigue reflejando el traspaso de los costos al productor, por el incremento en los precios de materias primas, entre otros factores.
  • Implicación: La alta base comparativa ayudará a que la inflación anual se modere en el 2T. Sin embargo, el panorama sigue siendo incierto y con riesgos al alza, en la medida en la que se extienden el conflicto en Ucrania y los confinamientos en China, que contribuyen al desbalance entre oferta y demanda. Ante ello y la expectativa del endurecimiento monetario de la Fed, prevemos que el Banxico suba en 50 pb. la tasa objetivo esta semana.

Inflación mensual: Alta estacionalidad en abril

La variación mensual fue la mayor para un abril desde 2002; en el caso del índice subyacente, desde 1999. Los incrementos fueron liderados por alimento frescos y procesados (jitomate, aguacate, pollo, tortilla); también destacaron alzas en gasolinas y servicios relacionados al turismo (feriado Semana Santa). El genérico que más incidió a la baja fue la electricidad, por un efecto estacional (aplicación de tarifa de temporada cálida en 18 ciudades).

Inflación anual: La mayor en más de 21 años

A tasa anual, tanto el índice general como el subyacente se aceleraron respecto al mes previo y marcaron un récord desde enero de 2001.

En el subyacente, sus dos componentes se presionaron. Las mercancías, especialmente alimenticias, por el traspaso de los altos precios de materias primas, como granos. En los servicios, destacó el alza en aquellos distintos a vivienda y educación (bajos contagios, efecto Semana Santa).

La elevada cotización internacional de energéticos y alimentos, ante la guerra en Ucrania, mantuvieron presión sobre el no subyacente, aunque su variación interanual se moderó por una alta base comparativa en agropecuarios.

Costos al productor: Sin señales de moderación

Pasó de 10.17 a 10.35% a/a, al tiempo que los precios internacionales de algunos granos y energéticos se mantuvieron elevados. Los costos de producción para bienes y servicios destinados al consumo final pasaron de 7.19 a 7.76% a/a.

Poco margen de maniobra para el Banxico

La inflación anual se desacelerará a partir del 2T, en buena medida, gracias a un efecto aritmético, por una alta base comparativa. Sin embargo, la variable no bajaría del 4.0% hasta 2024 y su panorama sigue siendo incierto y con riesgos sesgados al alza.

El extensión del conflicto en Ucrania ha mantenido elevados los precios internacionales de materias primas y otros insumos para la producción, los cuales seguirán siendo traspasados, en cierta medida, al consumidor final. Además, junto con los últimos confinamientos en China, seguirán habiendo obstrucciones en la proveeduría de distintas mercancías a nivel mundial, contribuyendo al desbalance entre oferta y demanda. Además, preocupa que las fuertes variaciones en los precios por un tiempo prolongado contaminen a las expectativas y, así, se genere más renuencia a bajar en la inflación.

Ante un panorama deteriorado para la inflación y dada la expectativa de un agresivo endurecimiento monetario de la Fed, y con la finalidad de mantener el anclaje de las expectativas de precios, contribuir a que la inflación efectivamente se modere y evitar un deterioro en las condiciones de operación en mercados domésticos, estimamos que el Banco de México continúe elevando la tasa objetivo en sus próximos reuniones, llevándola hasta 8.50% al cierre de año.